Galería 1Galería 2Rojo, Negro y Blanco: los colores de la tierraLas texturas y la tensiones que se crean entre las mismas y el espectador constituyen el motivo esencial de las pictoesculturas de Pablo Ariza. En sus obras el espacio y la riqueza cromática captan la atención y permiten descubrir detalles nuevos distintos a los percibidos con la primera mirada.Las obras aquí incluidas, muestran en la mayoría de los casos aspectos orgánicos de fusión del hombre con la tierra. De ahí que los colores primarios y las texturas terrosas sean los protagonistas. Pictoesculturas que tensionan la mirada del espectador y le provocan para que toque la obra y la sienta.